Desde este miércoles 8 de mayo, la reserva marina de Cabo de Palos contará con un refuerzo en su vigilancia para combatir la pesca ilegal. A través del Servicio de Pesca y Acuicultura de la Comunidad Autónoma, se ha incorporado un dron a la Unidad de Vigilancia Marítima, con un radio de acción de 250 kilómetros de costa, que promete aumentar la celeridad y precisión en las inspecciones.
En un vuelo inaugural que tuvo lugar en la explanada del Faro de Cabo de Palos, la consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Sara Rubira, junto con otras autoridades locales y pesqueras, presenciaron el inicio de operaciones del dron. El objetivo principal es evitar la pesca de furtivos, complementando la labor de vigilancia que ya realizan las embarcaciones de la Cofradía de Pescadores y del propio Servicio de Pesca y Acuicultura.
El dron, con categoría de aeronave del Estado, está equipado con una cámara de última generación, con sonido, capaz de resistir vientos de hasta 40 km/h y con una autonomía de unos 40 minutos. Además, cuenta con varias baterías de repuesto para permitir una vigilancia continua.
La inversión de la Comunidad Autónoma en este dispositivo ha sido de 13.000 euros, y si los resultados son satisfactorios, se planea adquirir otro dron de ala fija el próximo año, aún más preciso en sus funciones.
La lucha contra la pesca ilegal es una prioridad en la región, con 300 inspecciones realizadas el año pasado que resultaron en 51 expedientes sancionadores. El 92 por ciento de estos expedientes estaban relacionados con la pesca realizada por personas no autorizadas, siendo el canal del Estacio en La Manga el lugar donde más infracciones se detectaron.
Con la implementación de este dron y la colaboración con otras autoridades como la Policía Nacional, Policía Local y SEPRONA, se espera reducir significativamente la práctica de la pesca ilegal en la reserva marina de Cabo de Palos. Un paso más en la protección de nuestro ecosistema marino y en el apoyo al sector pesquero legal de la Región.