En un esfuerzo conjunto por combatir la exclusión social y residencial en el municipio de Murcia, el Ayuntamiento ha firmado la aceptación de cinco nuevas viviendas cedidas por la Comunidad Autónoma. Esta iniciativa, enmarcada en los programas operativos del Fondo Europeo de Desarrollo Local y Regional y el Fondo Social Europeo 2014-2020, tiene como objetivo principal el realojo de familias en situación de vulnerabilidad.
La vicealcaldesa y concejal de Fomento y Patrimonio, Rebeca Pérez, destacó la importancia de esta colaboración entre las administraciones regional y local para el programa de actuación y acompañamiento al realojo de familias en exclusión social y residencial cronificada, conocido como Programa PARES. Desde su inicio en mayo de 2020, este programa ha permitido la cesión de un total de 49 viviendas por parte de la Comunidad Autónoma al Ayuntamiento de Murcia, sumando ahora cinco más a esta cifra.
El Programa PARES busca facilitar el acceso a la vivienda a familias que viven en condiciones precarias en la Región de Murcia, promoviendo su integración social, laboral, educativa y sanitaria para combatir la pobreza y la discriminación. Las familias beneficiarias de estas viviendas son acompañadas en todo el proceso por la Asociación Habito y la Sección Social del Servicio de Vivienda, garantizando así un apoyo integral durante su transición a una vivienda digna.
Rebeca Pérez señaló que esta cesión representa un avance significativo en el compromiso del Ayuntamiento de Murcia por ayudar a las familias más desfavorecidas, brindándoles la oportunidad de acceder a una vivienda estable y mejorar su calidad de vida. A través de esta iniciativa, se busca también beneficiar a los menores de estas familias, proporcionándoles un entorno más seguro y estable para su desarrollo social y educativo.
Con este incremento en el parque de viviendas sociales destinadas a familias sin recursos, el Ayuntamiento de Murcia refuerza su compromiso con la inclusión social y la lucha contra la exclusión residencial en la ciudad. La colaboración entre las administraciones regional y local se consolida como una vía efectiva para atender las necesidades de las familias más vulnerables y construir una sociedad más equitativa y solidaria.
